Más de 400 madrileños no recibieron el Ingreso Mínimo Vital en enero por un fallo burocrático
La Seguridad Social asegura que el Ayuntamiento no entregó las renovaciones, pero el Consistorio certifica que sí.
Más de 400 beneficiarios madrileños del Ingreso Mínimo Vital no han recibido la ayuda económica este pasado mes de enero por un error de renovación de certificados por parte de la Seguridad Social, tal y como han informado fuentes del área de Políticas Sociales del Ayuntamiento de Madrid. Varios usuarios acudieron a los centros de servicios sociales municipales preocupados porque el ingreso del primer mes del año no se había realizado porque, como dictaban unas cartas del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) "se habían suspendido cautelarmente porque los servicios municipales no habían renovado y aportado el certificado que acredita su situación de exclusión social".
Estos funcionarios municipales elevaron la cuestión al Ayuntamiento porque, tras recibir a los afectados, comprobaron en ese sistema que esta documentación sí había sido entregada. Fuentes de la Seguridad Social explican que, efectivamente, esta ausencia de ingresos a los beneficiarios ha ocurrido de forma "puntual" porque "los certificados no han llegado a tiempo". Y que, una vez se renueven estos permisos, los receptores "recibirán el importe de los meses transcurridos desde la suspensión temporal". Sobre esto, dichas fuentes municipales reiteran que, tras realizar las comprobaciones pertinentes, certifican "con seguridad" que los servicios municipales sí enviaron en tiempo y forma dicha documentación antes del 31 de diciembre de 2024. Pero que, de las 2.119 renovaciones solicitadas, 402 no fueron procesadas por los servicios de la Seguridad Social.
"Dimos respuesta a todos y cada uno de los 2.119 casos de renovación que nos remitieron y disponemos de los justificantes de envío por registro. De hecho, a los afectados que acudían a las oficinas les hemos entregado una copia del certificado y del justificante para que los presentasen ante el INSS y, así, resolver su situación lo antes posible", narra el delegado del área, José Fernández. Sin embargo, Fernández subraya que el INSS rechazó estos documentos presentados de manera presencial y ha solicitado a los centros municipales que reenvíen dicha documentación por correo electrónico, afectando "a las familias vulnerables que no han recibido ese dinero tan necesario este primer mes del año y entorpeciendo el trabajo de los funcionarios, que, ahora, deberán emplear su tiempo en hacer los trámites por duplicado".
68 incidencias en las últimas dos semanas
Además, el Ayuntamiento confirma que también han recibido incidencias sobre la suspensión de pago en las cuatro oficinas de información de prestaciones no municipales, sedes donde "se orienta e informa en la tramitación en línea del IMV y otras ayudas sociales de competencia estatal". Dichas oficinas han notificado 68 incidencias en las dos últimas semanas en las que los funcionarios imprimieron los justificantes posteriormente rechazados por el INSS. Sobre esto, el Ayuntamiento lamenta "las acusaciones que responsabilicen a los profesionales municipales de los errores o dejación de funciones de otros". Por ello, Fernández afirma que el pasado 27 de enero remitieron un escrito a la Dirección Provincial de Madrid para "pedir una rectificación y trasladar la preocupación del Consistorio por que estos hechos se repliquen en un futuro, afectando a los perceptores de la prestación y a sus familias, que son madrileños en una situación de vulnerabilidad".
Por el momento, dichas fuentes aseguran que no han recibido una respuesta formal de la Seguridad Social y aseguran que el Ayuntamiento "colabora estrechamente con los beneficiarios de todo tipo de ayuda para asesorar en la petición y tramitación de prestaciones para vecinos en situaciones de pobreza o vulnerabilidad". "El objetivo de este servicio es que estas personas en situación de vulnerabilidad no vean disminuidos sus derechos por la dificultad que puede suponer la compleja gestión de las solicitudes, que suelen requerir un conocimiento específico de la normativa y el acceso a medios técnicos y telemáticos que, en ocasiones, no son accesibles a esta población", concluye Fernández.