Frío cara a cara entre Luis Rubiales y Luis de la Fuente en el segundo día del juicio: intercambio de miradas y tibio saludo

Si algo ha dejado claro la segunda jornada del juicio al expresidente de la RFEF Luis Rubiales por su beso no consentido a Jenni Hermoso es que su relación Luis de la Fuente, actual seleccionador nacional masculino, ya no es la que era. Ambos han dejado un encuentro frío en la sede de la Audiencia Nacional en San Fernando de Henares: un breve intercambio de miradas y un gesto con la cabeza, sus únicas interacciones.

Cuando el motrileño ocupaba la presidencia de la Federación, Rubiales y De la Fuente, entrenador en las categorías inferiores de la Roja entre 2013 y 2022, mantenían una buena relación, casi incluso de amistad. De hecho, la confianza entre los dos era tal, que el expresidente eligió al de Haro para ser el sucesor de Luis Enrique al frente de la absoluta tras la marcha del asturiano después de la eliminación de España en octavos en el Mundial de Qatar.

Todo eso ha quedado ahora atrás. De la Fuente, que aplaudió el discurso de Rubiales en aquella polémica Asamblea extraordinaria, en la que anunció su intención de continuar en el cargo, y posteriormente se retractó en un comunicado en el que censuró los actos del expresidente, apenas ha saludado a Luis Rubiales a su llegada al tribunal.

El seleccionador nacional masculino, penúltimo en prestar declaración como testigo en la segunda sesión del juicio al que fuese máximo responsable de la Federación entre 2018 y 2023, ha dirigido su mirada a la parte izquierda de la sala, donde se encontraban sentados Rubén Rivera, Jorge Vilda y Luis Rubiales junto a sus defensas, al acceder a la sala, sin más gestos, y con el motrileño devolviéndole la mirada.

No ha habido más interacciones entre ambos durante el testimonio del técnico. Sí una vez que este ha concluido su vista: mientras se levantaba de su asiento, ha vuelto a mirar a Rubiales para despedirse con un leve movimiento de cabeza, al que el expresidente de la RFEF ha contestado con una sonrisa.

Jornada tranquila para Rubiales

Solo dos días han pasado desde el inicio del juicio que decidirá si Luis Rubiales es culpable de los delitos de agresión sexual y coacciones por los que la Fiscalía reclama dos años y medio de prisión para él, pero al expresidente de la RFEF se le ve tranquilo.

La tensión del primer día, propia de su encuentro con Jenni Hermoso casi un año y medio después de lo ocurrido durante la entrega de medallas del Mundial en Sídney, ha dado paso este mates a una jornada tranquila para el motrileño, que ha vivido la sesión de manera distendida, sonriente e incluso riendo en algunos momentos con las palabras del juez José Manuel Clemente Fernández-Prieto González.

El momento clave para Luis Rubiales no llegará hasta el próximo 12 de febrero, cuando se sentará ante el magistrado para declarar en la causa. Ese mismo día lo harán también el resto de acusados, Jorge Vilda, Rubén Rivera y Albert Luque, imputados por un delito de coacciones.