Irán militariza el corazón del comercio global

A finales del mes de enero de 2025 la televisión iraní difundía unas impactantes imágenes de la guardia revolucionaria (IRGC) en unas maniobras militares que comenzaron a principio de año y terminaran en el mes de marzo bajo la denominación “Eqtedar” o “Poder” en farsi en Ormuz, un punto focal de la economía global, especialmente … Continuar leyendo "Irán militariza el corazón del comercio global"

Feb 5, 2025 - 07:40
 0
Irán militariza el corazón del comercio global

A finales del mes de enero de 2025 la televisión iraní difundía unas impactantes imágenes de la guardia revolucionaria (IRGC) en unas maniobras militares que comenzaron a principio de año y terminaran en el mes de marzo bajo la denominación “Eqtedar” o “Poder” en farsi en Ormuz, un punto focal de la economía global, especialmente en lo que respecta a la energía.

El estrecho de Ormuz que cruzan 30.000 barcos cada año es un angosto canal que conecta el Golfo Pérsico con el Golfo de Omán y el océano Índico, una arteria fundamental para el transporte de petróleo y la estabilidad de su precio en los mercados internacionales, siendo uno de los pasos marítimos más estratégicos del mundo. Los principales países exportadores de petróleo en la región, como Arabia Saudita, Irán, Kuwait y los Emiratos Árabes Unidos, dependen de esta ruta para exportar sus recursos energéticos y cualquier interrupción en el tráfico marítimo a través del estrecho tendría un impacto inmediato en el suministro de energía global y podría desencadenaría aumentos muy relevantes en los precios del petróleo.

El comandante de la fuerza revolucionaria naval de Irán, Alireza Tangsiri, presentaba en público las maniobras como unos ejercicios reales de entrenamiento para evitar una futura invasión. Mostraba numerosas lanchas rápidas preparadas en un largo túnel, un barco de reconocimiento de última generación, numerosos helicópteros “avispa” y misiles costa-mar y tierra-tierra en acción bélica. Ocultaba en las filmaciones los drones, las minas y las bombas lapa que tanto daño han hecho a los barcos occidentales que cruzaron el estrecho en el pasado perdiendo millones de barriles en atentados y operaciones de sabotaje, con un gran impacto económico y medio ambiental.

Por el estrecho de Ormuz, un cuello de botella vulnerable de 33 km en su punto más estrecho, sus tres islas estratégicas, Gran Tunb, Tunb Menor y Abu Musa y sus numerosos canales pasan cada día barcos con 21 millones de barriles de petróleo, más del 21 % del petróleo y del gas licuado que se consume en el mundo. Siempre que hay una crisis en la zona se especula con un posible cierre forzado por las tropas de Irán con el considerable impacto tanto sobre el coste de los fletes como sobre la propia materia prima. Un choque geopolítico en una zona de alta tensión que no puede descartarse dadas las recientes declaraciones del analista iraní Mosaddeq Mosaddeqpour “Irán no puede ganar una guerra contra occidente; debería luchar contra ellos económicamente cerrando los estrechos de Ormuz y Bab Al-Mandab”.

El hecho es que un cierre prolongado produciría un daño muy relevante para los países de la zona, incluida Irán que depende en un 65 % de su presupuesto de los ingresos procedentes del petróleo, impactando en China su principal cliente que está comprando los barriles de Brent con el menor descuento desde hace años y podría elevar el precio de sus productos para compensar la subida del precio del petróleo.

Aproximadamente el 82 % del crudo que cruza el estrecho de Ormuz acaba en los mercados asiáticos con China, India, Japón y Corea del Sur como principales destinos. Para evitar ver el barril de nuevo a más de 100 $n, está desplegada en el Golfo Pérsico una flota considerable de barcos occidentales, con la quinta flota de los EEUU en Bahréin por lo que a la fecha actual los analistas le dan una baja probabilidad de ocurrencia a dicho cierre.

Hay muchas decisiones tomadas para reducir el impacto del cierre del estrecho. Arabía Saudita y los Emiratos Árabes (UAE) cuentan con una red de modernos oleoductos operadas por Aramco que pueden llegar a transportar más de 7 millones de barriles de petróleo diarios. Asimismo, Irán podría llegar a transportar diariamente hasta 3,5 millones de barriles por su oleoducto de Goreh-Jask.

En 2018 durante el primer mandato de Trump se tomó la decisión de dar de baja a los Estados Unidos del acuerdo nuclear, Plan de Acción Integral Conjunto firmado en 2015. También se ordenó la eliminación del comandante iraní Qasen Soleimani con un dron en territorio iraquí. En esta segunda legislatura, el presidente ha decidido presionar Irán para que acepte la paralización de su programa nuclear por la vía de un acuerdo forzado por sanciones adicionales sin dar a Israel, de momento, luz verde para atacarlo militarmente, las palabras son “seria realmente bueno si se pudiera resolver sin tener que dar ese paso más “.

Arabia Saudí y los Emiratos quieren un cambio político en Irán e Israel quiere completar su derrota neutralizando su poder militar. Si Israel vuelve a atacar Irán, con o sin permiso de su aliado EEUU y se ve afectada la infraestructura petrolífera, el precio del petróleo sufriría repuntes con el conocido impacto sobre el mercado. La OPEP quiere reactivar parte de su producción paralizada desde diciembre de 2023 para estar preparada en ese no descartable escenario. La prima de riesgo del petróleo solo subiría si la escalada bélica, hoy encapsulada, afectase a las infraestructuras o a los flujos en este barómetro de la estabilidad geopolítica y económica mundial.

Esta misma semana el primer ministro de Israel, Netanyahu de visita oficial en los EEUU ha cubierto una agenda muy compleja y dadas sus recientes declaraciones donde afirmaba que “ la guerra ha cambiado la faz de Oriente Medio y con la ayuda de Trump, Israel puede cambiarla más y para mejor” no es descartable que además de la segunda fase del alto el fuego en la franja de Gaza, la liberación de los 79 rehenes que aún quedan presos desde el fatídico 7-O y las futuras relaciones con Arabia saudí desarrollando los históricos Acuerdos de Abraham que Trump liberó, se dedique una parte de la conversación a confirmar el apoyo de los EEUU a una acción militar de Irán para poder neutralizar las bases que amenazan la estabilidad en la zona.

En los próximos días veremos qué ocurre y mientras, Irán tiene desplegado en el estrecho de Ormuz una parte de su ejército por lo que pueda pasar. Como señaló en su día el Real Instituto Elcano, “el estrecho de Ormuz es la válvula de escape que utiliza Irán para aliviar la presión que se ejerce desde fuera del Golfo, “.

Ocurrió en el año 1988, 2012 y en 2019, ¿será de nuevo ya en 2025 otra ocasión más para crear mayor inestabilidad atacando buques que transportan petróleo?  O estas maniobras son simplemente el aviso de lo que puede pasar si Israel emprende una acción militar contra Irán…veremos las próximas semanas que ocurre.

Si vis pacem, para bellum

José Luis Moreno, economista ha sido director de Economía en la Comunidad de Madrid y en el Ayuntamiento de Madrid. Analista económico y empresarial.