Ortiz Tejeda: Nosotros ya no somos los mismos
Posiblemente recuerden que, en una entrega anterior, afirmamos que los grandes potentados y dueños de nuestro (¿nuestro?) planeta, se han posesionado no sólo de todo aquello que nos brinda en su superficie y que permite nuestra vida y preservación, sino además de todo aquello que se encuentra muy distante, allá en el espacio exterior. Y no se diga lo que guarda en sus propias entrañas, donde atesora materias y minerales milagrosos que pueden transformar la existencia de nuestra raza y que muchas veces sólo sirven para separar y enfrentar a los humanos, que les dan más valor del que realmente tienen: reparar la salud, provocar un mejor nivel de vida, gozar más del enriquecedor tiempo libre.
Posiblemente recuerden que, en una entrega anterior, afirmamos que los grandes potentados y dueños de nuestro (¿nuestro?) planeta, se han posesionado no sólo de todo aquello que nos brinda en su superficie y que permite nuestra vida y preservación, sino además de todo aquello que se encuentra muy distante, allá en el espacio exterior. Y no se diga lo que guarda en sus propias entrañas, donde atesora materias y minerales milagrosos que pueden transformar la existencia de nuestra raza y que muchas veces sólo sirven para separar y enfrentar a los humanos, que les dan más valor del que realmente tienen: reparar la salud, provocar un mejor nivel de vida, gozar más del enriquecedor tiempo libre.
Publicaciones Relacionadas